En primer término, Xavi Pellicer y Elisabet Carnice. detrás, Rafael Vertamatti y Pablo Guasch, co- propietario de Carmelitas.
Barcelona, abril 2015. Gran iniciativa los brunchs domingueros del cava Anna de Codorniu que se mantendrán por unos meses en un circuito de restaurantes por toda la ciudad.
Primera parada en CARMELITAS, en el Raval: producto honesto, cocciones impecables, raciones correctas. Al frente de los fogones, un maestro: Xavi Pellicer.
Sólo un par de comentarios:
En los comienzos de su fama, el capo de la música HOUSE, gran tipo por cierto, me dijo: «El éxito de un DJ está en mirar al público y saber qué necesita en cada momento. Yo estoy para observar y hacer mi trabajo, el que escucha la música es quien da las pautas».
Armin van Buuren, el carita de ángel con platos infernales, piensa lo mismo: «Una música mal aplicada puede hundirte. Cada melodía tiene su momento». Gran tipo también.
Los que quieran ocupar un puesto en la cadena musical quizás deberían reflexionar al respecto: No se puede comer teniendo que gritar para hacerse entender. En la playa, con pareo y berberechos, quizás, pero con una comida a la que hay que prestar atención, para nada. Por lo demás, nota alta al CARMELITAS. En el menú: Ensalada mezclum eco, Huevos Benedictine para ponerles un piso, Blinis con salmón, Crema de verduras (deliciosa aunque con lácteo), Coca de recapta con sardina ahumada y escalibada, Fricandó para mojar pan, Macedonia, Brownie… Para repetir, con la música a su volumen.
Una buena idea para una buena relación gastronómina
Comentarios recientes